La inversión en Ethereum alcanza los 337,7 millones de USD tras grandes compras de ETF

Se están produciendo movimientos importantes en el mundo cripto. BlackRock y Fidelity, dos de los nombres más grandes de las finanzas, han invertido un total de 337,7 millones de USD en Ethereum a través de sus ETF. Esto demuestra que el interés institucional por las criptomonedas está creciendo rápidamente y confirma que Ethereum se está consolidando como un activo mainstream.

Grandes nombres, grandes movimientos

BlackRock, el mayor gestor de activos del mundo, y Fidelity, un gigante de los servicios financieros, están marcando el paso. Sus inversiones no son casuales. Son estratégicas. Ambas compañías ofrecen a los inversores exposición a Ethereum sin necesidad de poseer directamente la criptomoneda.

El iShares Ethereum Trust ETF (ETHA) de BlackRock lideró con entradas de capital por 233,5 millones de USD. El Ethereum Fund (FETH) de Fidelity añadió 28,5 millones. Otros ETF, como Bitwise ETHW y VanEck ETHV, aportaron en conjunto unos 25 millones.

Por qué es importante

Estas compras son más que simples cifras. Tienen un efecto real en el mercado. Los ETF al contado de Ether en EE. UU. registraron entradas netas por 287,6 millones de USD, poniendo fin a una racha de cuatro días de salidas. El precio de Ethereum reaccionó con rapidez y alcanzó los 4.331 USD. Se trata de una ganancia del 16,6% en el último mes.

Que inversores de gran tamaño como BlackRock y Fidelity compren Ethereum refuerza su credibilidad. Hace que el público general también se sienta más seguro a la hora de invertir y muestra que las criptomonedas están saliendo del nicho tecnológico para entrar de lleno en el mainstream financiero.

Influencia institucional y riesgos

Sin embargo, hay otra cara de la moneda. A medida que las instituciones acumulan Ethereum, comienzan a controlar una parte relevante del suministro total. Esto genera dudas sobre la descentralización. Al fin y al cabo, el mundo cripto nació para estar distribuido, no concentrado.

Además, los grandes inversores pueden influir en el mercado. Si bien aportan estabilidad y legitimidad, sus operaciones también pueden provocar oscilaciones bruscas de precios. Los inversores minoristas deben ser conscientes de esta dinámica antes de lanzarse.

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