Noticias

Deutsche Bank prevé que las reservas de Bitcoin aumenten junto al oro

Por

Shilpa Patil

Shilpa Patil

Las reservas de bitcoin podrían formar parte de los depósitos centrales globales. Deutsche Bank cita mejoras en la estabilidad. ¿Podría 2030 marcar el cambio?

Deutsche Bank prevé que las reservas de Bitcoin aumenten junto al oro

Resumen rápido

Resumen generado por IA, revisado por la redacción.

  • Deutsche Bank predice que los bancos centrales podrían mantener Bitcoin junto con el oro para 2030.

  • La volatilidad decreciente de Bitcoin y la claridad regulatoria aumentan su atractivo como activo de reserva.

  • El oro sigue siendo dominante, pero Bitcoin ofrece beneficios de suministro fijo y diversificación de cartera.

  • Las soluciones de custodia institucional reducen los riesgos operativos, fomentando la adopción de criptomonedas por parte de los bancos centrales.

La última nota de investigación de Deutsche Bank señala un desarrollo relevante. El banco sugiere que para 2030 los bancos centrales podrían mantener tanto oro como Bitcoin en sus reservas. El oro seguirá siendo el activo de cobertura principal, pero Bitcoin podría ganarse un lugar como almacén de valor complementario. ¿Qué impulsa este cambio? La caída de la volatilidad de Bitcoin, una mayor claridad regulatoria y mejores infraestructuras institucionales. El oro no desaparecerá, pero ahora existe un camino viable para que Bitcoin se sitúe a su lado.

Coexistencia entre reservas de oro y Bitcoin

En su última nota, Deutsche Bank plantea que el oro y Bitcoin no son competidores en las reservas, sino que pueden coexistir. El oro, con su historial incomparable, gran liquidez y reputación de estabilidad, seguirá siendo indispensable. Sin embargo, Bitcoin aporta características como una oferta fija, flexibilidad tecnológica y una dinámica de precios que a menudo se desvincula de la volatilidad del mercado. Además, en periodos de inflación o de tensiones globales, esta combinación puede representar una decisión estratégica de asignación de activos.

El banco también destaca un cambio notable: la volatilidad de 30 días en el precio de Bitcoin ha caído a sus niveles más bajos en años, al mismo tiempo que su precio superaba hitos importantes. Bitcoin empieza así a dejar de ser visto únicamente como un activo especulativo y comienza a perfilarse como una opción realista de reserva. Es una señal de que los bancos centrales podrían actualizar sus estrategias e incorporar Bitcoin junto al oro en sus carteras de reservas.

¿Puede la regulación impulsar un mayor crecimiento de los criptoactivos?

La claridad regulatoria es el motor principal. Deutsche Bank apunta que algunas jurisdicciones europeas y asiáticas ya están estableciendo directrices sobre custodia de criptoactivos, prácticas contables y requisitos de información. Una vez que estas normas se consoliden y se vuelvan predecibles, la reticencia de los responsables de los bancos centrales podría empezar a disminuir.

A esto se suman los avances en infraestructura de mercado, como soluciones de custodia de nivel institucional y diferenciales más ajustados, que ayudan a reducir los riesgos operativos. Aun así, persisten los obstáculos. La volatilidad, aunque algo menor en la actualidad, sigue siendo un problema.

Persisten también incertidumbres legales, la liquidez no siempre está garantizada en algunos mercados emergentes y el marco contable aún está en evolución. Como recalca Deutsche Bank, preservar la autoridad de las monedas nacionales sigue siendo una prioridad fundamental para los reguladores.

¿Adoptarán los bancos centrales Bitcoin en 2030?

Si la tendencia actual se mantiene, para 2030 los bancos centrales empezarán a destinar espacio a Bitcoin en sus carteras de reservas. Deutsche Bank sugiere que los activos digitales probablemente se integren en carteras más diversificadas. Esto sucedería una vez que existan regulaciones más sofisticadas y que la volatilidad de Bitcoin se haya moderado.

Las métricas clave serán la estabilidad del precio, la correlación de Bitcoin con otros activos de riesgo y la velocidad con la que evolucionen los mercados relacionados. Bitcoin resultará más atractivo como activo de reserva si logra mantener estabilidad en momentos de tensión de mercado.

Es posible que en 2030 los bancos centrales incorporen discretamente algo de Bitcoin en sus reservas de oro. No sería una transformación drástica, sino una coexistencia entre Bitcoin y oro en lugar de una exclusión mutua.

¿Puede la reserva de Bitcoin moldear las finanzas globales?

El escenario que plantea Deutsche Bank está configurando un nuevo enfoque en las estrategias de gestión de reservas. Por ahora, el dólar y otras divisas fiduciarias principales siguen siendo predominantes, sin discusión. Pero la composición de las reservas es flexible y, con este cambio, no sorprendería ver cierta diversificación. El sector observa cada movimiento: cómo reacciona Bitcoin en momentos de crisis, qué respuestas dan los reguladores y cómo evoluciona la infraestructura. Aún no es una revolución, pero la conversación ya está presente en ámbitos de decisión relevantes.

Reflexiones finales

La perspectiva de Deutsche Bank sugiere que para 2030 no sería irrealista ver a los bancos centrales manteniendo reservas de Bitcoin junto al oro. Todo dependerá de que Bitcoin supere su volatilidad, aumente la regulación y mejore la infraestructura. Además, los responsables políticos deberán sentirse más cómodos con el concepto de criptoactivos. El oro seguirá siendo claramente el activo dominante, pero Bitcoin podría entrar como cobertura adicional si se dan las condiciones adecuadas. En los próximos años se verá si este cambio potencial se convierte en realidad o queda en el terreno de los informes de analistas

Google News Icon

Síguenos en Google News

Obtén las últimas perspectivas y actualizaciones cripto.

Seguir